Hoy he visto
Take Shelter, una de obsesiones apocalípticas y demás pasatiempos norteamericanos.
Segundo largometraje de
Jeff Nichols tras la inédita en España
Shotgun Stories. Al director se le nota con ganas de ver sus DVDs en la sección de cine de autor y la verdad es que va por buen camino. Intimista y humana,
Take Shelter es el ejemplo de película sesuda pero, atento a esto
Malick, con un argumento interesante y que se puede seguir.
La trama nos cuenta como un tipo de Arkansas empieza a tener visiones sobre una futura tormenta apocalíptica. Su obsesión es construir un refugio donde guarecerse junto con su esposa y su hija. El problema es que la construcción del mismo costará un dinero y claro, acaban de darle el visto bueno para una operación que podría curar la sordera total que sufre su pequeña.
Michael Shannon, el agente Nelson en
Boardwalk Empire, es el torturado protagonista. El actor se deja la piel en la interpretación y presenta un personaje tan realista como perturbador. Le acompaña
Jessica Chastain que no se pierde una y todo lo hace bien. La sufrida relación con su marido y la perfecta sintonía con su hija, la debutante
Tova Stewart, merecen otra nominación para la actriz de moda.
|
Hija, a tu padre se le ha ido la pelota |
El problema de la peli es que es claramente de esas que gustará mucho a los críticos pero no tanto al público. Las dobles lecturas de los expertos, los que ven reflejados conflictos ancestrales del ser humano en un charco de agua, harán las delicias de entendidos y snobs. Los que solo somos amantes del cine, disfrutaremos con una historia con tintes oscuros, personajes bien construidos y trasfondo apocalíptico. Algo así como una versión de
Melancolía pero sin la prepotencia y poética de
von Trier. Por otro lado, a los que solo busquen pasar la tarde se les puede hacer muy cuesta arriba.
La música de
David Wingo está a punto de ser muy buena pero se queda en pasable. Repite desesperadamente un detalle muy bonito de su partitura y no termina de avanzar. Una pena porque realmente prometía esta mezcla inicial entre
Jeff Beal y
Michael Giacchino.
En conclusión, un gran trabajo de interpretación y dirección que recuerda a grandes películas pero que sabe encontrar su propio hueco. Aun así, no llega a destacar todo lo que me gustaría.
|
Cariño eres más raro que una peli de Terrence Malick |
No hay comentarios:
Publicar un comentario