El cartel funciona, luego ya... |
La trama adapta La Bella Durmiente desde el punto de vista de la antagonista e intenta contar la historia de cómo Maléfica se hace
mala. Se enamora de un chiquillo que, un poco porque sí, se la lía muy parda.
Enfadada, hechiza a la hija de este con la maldición que todos conocemos pero, como es
muy buena pese a llamarse un adjetivo de la crueldad personificada y tener cuernos y alas de criatura del averno, se arrepiente, cuida a la niña y es la mejor del reino. Siento el spoiler pero mejor aquí y ahora que pagar y que os llevéis el chasco.
Mira niña tú te vas a pinchar que estás tonta |
El resto del reparto se queda en nada, desde la nada
magnética Elle Fanning, cabía esperar mucho más de la princesa Aurora, hasta
Sharlto Copley, un tipo especializado es hacer villanos mierder.
Robert Stromberg se estrena en la dirección con esta
película aunque ya a trabajado en multitud de superproducciones en el campo de
los efectos especiales. Cuando miras en su ficha y descubres que fue el encargado
del diseño de producción de Alicia en el País de las Maravillas y Oz, un Mundo de Fantasía, entiendes lo que acabas de ver. De
hecho, todo en el mundo de Maléfica parecen recortes de estas dos películas.
Sólo si esta hubiese sido la primera tendría algo de mérito.
Y va y toca la agujita la TONTA |
Todos estos fallos serían más fáciles de soportar si
no fuese por su verdadero problema: ni el villano soso, ni el cambio de roles,
ni siquiera las insoportables hadas madrinas, el verdadero problema de Maléfica
es que es que al final resulta
aburrida.
Con alitas ya se sale |
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