30/10/14

El Chico del Millón de Dólares (Million Dollar Arm)

El Chico del Millón de Dólares (Million Dollar Arm), el triunfo de la explotación bienintencionada.

Venga Don, ¡a por todas!
Seguro que muchos hijos de los 80 y 90 recuerdan esa decepción cuando, después de ilusionare con el logo de Disney, descubrías que la película que lo precedía era de personas. Pues bien, esa sensación de pereza se sigue repitiendo en muchas producciones de la marca, especialmente a las que hace en solitario, sin un Marvel, un Pixar o cualquier otra salvaguarda. Si además la peli es sobre baseball, deporte del que no sé nada ni tengo intención de aprender, apaga y vámonos. Por eso puede que, dentro del sopor, tampoco me ha parecido tan mala.

La trama se basa en la historia real de un agente deportivo que se estaba quedando a dos velas. Un día se le ocurre la genial idea de viajar a la india donde parece que el deporte rey es el cricket. El lince piensa que puede entrenar a algún lanzador de ese deporte y convertirlo en estrella del baseball por cuatro duros, así que monta un concurso donde ganan dos chavalines asustados. Ya en Estados Unidos, tendrán que luchar para conseguir sus sueños, y el de su descubridor, claro.

Jon Hamm interpreta al americano desesperado al que le cuesta vender esta idea a los inversores. Esto ya es gracioso, ver a Don Draper sufriendo para endosar un proyecto es, cuanto menos, entretenido. El resto avanza como la seda, bajo la claridad de una película Disney y con apariciones momentáneas de caras conocidas pero baratas como Bill Paxton o Alan Arkin.

Todo sigue, todo es blanco, todo es descaradamente neutro. Hasta a los pobres protagonistas se les va clareando la piel. Bueno esto último no ocurre pero es que al final yo ya estaba a otras cosas y vete tu a saber. Pero oye que muy bien, mejor que una peli con niño y perro siempre será.

Descubriendo internet, imagínate
Aquí el trailer. Si no puedes esperar al estreno en Disney Channel un sábado por la mañana, háztelo mirar. Ansioso. Un 6.

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