Hombres, mujeres & niños (Men, Women & Children)

Hombres, mujeres & niños (Men, Women & Children), lo que internet ha unido, que no lo separe el mundo.

El cartel es MUY bonito

Nueva película de Jason Reitman y, una vez más, a quejarnos todos de que no es como Gracias por fumar. Es el problema de estrenarse con una obra tan potente, que luego te persigue. Y no, no es tan redonda, pero en esa división de críticas en las que la mitad están echando pestes, a mi me ha tocado en el sector de los que han disfrutado. Sí creo está más cerca de Juno o Up in the Air que de ese truñete que fue Young Adult. De Una vida en tres días no digo nada porque ni él se acuerda.

El argumento es un conglomerado de historias picaditas sobre seres humanos, norteamericanos de clase acomodada para ser más exactos, y su relación diaria con internet. Redes sociales, juegos online, páginas de ligoteo y, por supuesto, pornografía, pueblan la red a la espera de que incautos las usen mal o de que algún adulto histérico confunda manchas con suciedad.

El reparto es inmenso debido a la multitud de historietas que cuenta. Destaca la trama de Adam Sandler y Rosemarie DeWitt porque ambos están muy bien, sí, él tambien. Con Ansel Elgort y Kaitlyn Dever vivimos la historia más artificiosa donde Jennifer Garner interpreta a los que no terminan de entender cómo funciona el mundo, muchos de ellos son los que tampoco se han enterado de qué va esta película. El tramo de Judy Greer y Olivia Crocicchia está mal planteado en cuanto a tono y personajes, digamos que la madre es muy buena como para la que ha liado, y el de Elena Kampouris duele, sobre todo por no ver mucho a J.K. Simons que pulula por ahí.

Estos jóvenes...

La luz con la que está filmada esta cinta y el halo de comedia que arrastra, choca con la amargura que supura en cada relato. Nadie termina mal del todo, pero tampoco bien, aquí no hay buenos ni malos y el padre bonachón no disfrutará de la heroicidad de comprender a su hijo. Como cuando nos enseñó que es la industria tabacalera la que luchará más por la salud de un moribundo, Reitman nos recuerda aquí que internet no es el problema, somos, una vez más, nosotros. Eso queda claro desde el principio aunque ya digo que por lo que estoy leyendo, muchos han entendido lo contrario.

Lo mejor es que dejes esto como está y te acerques al cine, ves la peli y luego ya me cuentas. No te preocupes que ya recojo yo el blog mientras. Y date prisa, que en los USA aguantó un mes justito en exhibición porque fue a verla el director con los colegas y poco más. Pobre Reitman, no hay manera.

La vida en pareja

Aquí el trailer. Tiene un prólogo a lo Cosmos que desconcierta y agrada a partes iguales. Un 7'5.